Las fiestas pueden ser estresantes para todos, pero más aún si tienes diabetes tipo 1. Como la comida es el centro de atención en la mayoría de las celebraciones, debes estar más atento a cómo te cuidas para no ponerte en riesgo.
Mientras seas consciente, podrás disfrutar de las fiestas tanto como cualquier otra persona. Estas son las mejores formas de celebrar las fiestas sin poner en riesgo tu salud.
Mantente activo
La clave durante las fiestas es mantenerse activo para que el cuerpo pueda procesar el azúcar en sangre. Sentarse y charlar puede parecer lo que quieres hacer, pero hacer algo de ejercicio justo después de comer ayuda mucho. Juega al escondite con tus sobrinos, ponte al día con la tía Nancy durante un paseo por la cuadra o juega a las escondidas con el perro de tus suegros para ayudarlo a correr. O puedes sudar un poco antes de que comiencen las festividades del día.
Come antes de ir
Es fácil comer en exceso cuando asistes a celebraciones. Si estás atrapado en el ajetreo de las fiestas, puedes perder fácilmente la noción de lo que has comido.
En lugar de acudir a las reuniones con el estómago vacío, come algo antes de irte. Asegúrate de que tu refrigerio o comida pequeña contenga grasas y proteínas para ayudar a equilibrar los carbohidratos que consumirás más tarde.
Probablemente no querrás tener una comida completa mientras esperas tus platos favoritos de las fiestas, pero llénate lo suficiente para poder comer conscientemente y tomar buenas decisiones.
Planifica lo que vas a comer
No tengas miedo de preguntarle al anfitrión qué van a servir. Esto te permitirá planificar tus carbohidratos. Si hay un bocadillo con más carbohidratos que sabes que quieres, puedes omitir los aperitivos ricos en carbohidratos para equilibrar el día.
Planificar con antelación lo que vas a comer te asegura tomar decisiones más inteligentes. Engañas a tu cerebro para que coma solo lo que has planeado y eso te permite evitar tomar decisiones rápidas y desagradables.
Cuéntele al anfitrión acerca de sus inquietudes
No tengas miedo de contarle al anfitrión tus inquietudes sobre la dieta. Es probable que no seas el único y la mayoría de los anfitriones quieren que todos se sientan cómodos.
Algunos anfitriones harán todo lo posible para asegurarse de que tengas opciones. Otros pueden no ser tan complacientes, posiblemente porque no están familiarizados con los requisitos. Lo que nos lleva a...
Trae comida para compartir
No hay mejor manera de controlar lo que comes que traer tus propios platos. Si hay platos que te encantan pero que ahora tienen un alto contenido de carbohidratos o azúcar, prepara una versión apta para diabéticos. ¡Lakanto tiene excelentes recetas de postres que pueden ayudarte con eso!
Puedes traer lo suficiente para compartir con los demás para no sentirte fuera de lugar, pero puedes estar seguro de que también estás cuidando de ti mismo.
Piensa antes de comer
Algunos caprichos valen la pena por los carbohidratos y la insulina, otros no. Antes de darte un capricho, piensa si te resulta lo suficientemente placentero como para que valga la pena.
Beber mucha agua
Beber agua puede evitar que comas alimentos que no quieres comer. A veces comemos por aburrimiento o para sentir que pertenecemos a un lugar. Si tienes un vaso de agua en la mano, mantendrás tus manos ocupadas y no sentirás que tienes que comer solo porque todos los demás están comiendo.
Reflexiones finales
Celebrar las fiestas con diabetes tipo 1 no tiene por qué ser horrible. Puedes disfrutar de las fiestas, celebrar con amigos y familiares sin tener que tirar por la borda tu dieta. La clave es ser consciente, planificar con antelación y llevar alimentos que puedas comer.
Si puedes comer antes de salir y sabes que evitarás la comida, puede que sea la mejor opción, pero si no, improvisa. Mantente activo, sal a caminar después de comer comidas copiosas (e incluso incluye a miembros de tu familia) y mantén las manos y la mente ocupadas cuando todos estén comiendo para no comer en exceso y ponerte en riesgo.